martes, 3 de agosto de 2010

Una mirada

Era todo lo que hacía falta... Unos ojos entreabiertos en un mar de pestañas.

Parecía que el mundo fuera a acabarse de pronto, pero se detuvo ante esos cristales de amor y odio.

Esas sensaciones que transmiten las miradas, una risa acompañada de una lágrima.

Por la melodía que desprenden tus pupilas bajo el reflejo del sol de mediodía.

Esperando oír un suspiro a cada parpadeo, sin remedio.

Perdiendo una sonrisa cuando veo que tus ojos se achinan.

Emocionada de volver a ver ese color avellana tras cada esquina.

Palideciendo el decorado que me rodea para enfocar mi oscura pupila hacia tu mirada.

Esos ojos que jamás dejarán de brillar en mi memoria.




Glo.